Archivo mensual: julio 2012

El Quinteto de Arlequia +Capítulo 16+

Capítulo 16

Un nuevo viaje

El plan de Minho era simple, bueno todos lo entendimos sin problemas. Aunque a veces sentía que intentaba mantenerme alejado de Key. Pero entendía su preocupación, los sirvientes lo buscaban con frecuencia por el puerto y en la casa de Minho. La desaparición del joven Duque se volvió todo un suceso, las noticias viajaban por todo el país de Traviata, en la capital, Hirania, inclusive se había alzado un comunicado y se había publicado en unos cuantos periódicos.

Toda esta conmoción se volvía demasiado para mí, que fastidio. Aunque por el momento nadie me relacionaba con el duque, sentía que todo era mi culpa. Yo había alejado a un noble del buen camino, lo había vuelto un prófugo y lo había cambiado por completo. El vivía con pocos lujos con Taemin y Onew, lo cual debería ser un enorme castigo para alguien de su clase. Una persona fina y tan elegante como él había terminado en la casa de unos pescadores de la pequeña Arlequia. Pero lo que más me desesperaba es que no podía ir a visitarlo muy seguido.

Mientras tanto yo vivía como un príncipe en la casa del Lord, es cierto los primeros días me divertí como loco, con todas las cosas que nunca había experimentado de la vida de un noble. Pero entre más experimentaba de esta vida más me sentía mal por Key, como lo extrañaba. Cómo podía extrañar tanto a una persona que solo conocía pocas semanas.

-En Hirania las cosas no van bien – la voz de Minho cortó mis pensamientos – tenemos que poner en marcha el resto del plan.
– Prepararé todo mi lord – dijo Onew mientras hacía una reverencia con su mano en el pecho y servía el té en esa gran terraza con barandal blanco que daba al lago.

-¿Dónde está Taemin?- pregunté esperando oir noticias de Key, estaba por volverme loco, saltar desde la terraza en este momento no parecía una mala idea. De hecho era una mejor idea que volver a casa donde mi temperamental ex-prometida me estaba esperando. Después de salir herido cuando rompí nuestro compromiso, mi hermana insistía que no volviera por un tiempo.

– Su madre no se encuentra muy bien y quiere pasar más tiempo con ella Además se ha quedado con Key, parece que se han vuelto buenos amigos. Key se la pasa enseñándole cosas y lo utiliza como sirviente personal, inclusive le está enseñando varios vals y cuadrillas – mientras decía esto Onew presionaba con fuerza un vaso y su rostro aunque tenía una sonrisa parecía ser una sonrisa bastante tenebrosa…Un ruido detuvo en mi mente la imagen de Key bailando al ritmo del vals, se trataba del vaso de vidrio que sucumbió ante la presión de Onew.

-¿Estás bien Onew? Eso parece doler – me levanté con prisa para ver su mano – pero si estas sangrando – empecé a ir de un lado al otro en el balcón y dando círculos buscando que hacer.

-Toma esto – era Minho al rescate, quien tomó una de las servilletas de tela de la mesa y la amarraba haciendo presión en la mano de Onew – sigue presionando mientras llamó para que te den primeros auxilios y se levantó a buscar más sirvientes.

-Onew, disculpa a veces me cuesta decidir qué hacer –dije apenado – pero tu fuiste muy torpe al romper un vaso en tu mano – y me ataqué de risa, por que la situación al fin y al cabo era bastante graciosa.
-Deberías dejarte de reír de la desgracia ajena y ser más decidido – me dijo molesto mientras presionaba su mano y el vendaje improvisado – y no me refiero a estas situaciones. Key dejó muchas cosas por ti, así que debes estar orgulloso de él y no te sientas mal todo el tiempo.

Minho no tardó en volver con un sirviente que se llevó a Onew, pero mis pensamientos me llevaron a otro lado. Key había decidido muchas cosas, parecía que yo me había quedado atrás. Todo este tiempo estaba cuidando de mí, para que nadie creara rumores como dos años atrás, para que mi familia estuviera bien y para que mi prometida no me matara con su furia, creo que esto último era lo que más temía.

-Jonghyun – la voz de Minho me interrumpía – la segunda parte del plan está por comenzar.

-¿Segunda parte? –pregunté confundido.

– Si, de ahora en adelante ustedes tendrán que encargarse de todo. Pero antes debes saber algo de Key – yo moví mi cabeza afirmando y esperando que iniciará con la vital información para nuestra misión – Key es el único heredero, por lo que tiene el puesto de Duque asegurado. Sin embargo todos estos años quienes lo han controlado son los sirvientes y consejeros de su familia. Nunca se ha podido revelar ni desobedecer, pero esto puede acabar cuando cumpla 20 años. En esta edad según su testamento el tendrá el control completo de los bienes y actividades como Duque, pero es obvio que algunos se opondrán.

– ¿Te refieres a sus asistentes y otros nobles? – pregunté bastante interesado.

-Exacto, si cualquier escándalo o problema grave se presenta antes de su cumpleaños número 20 perderá muchos de sus derechos. Por eso tengo que pedirte que lo suyo no salga a la luz.

– Eso no me parece justo – dije mientras hacía un puchero.
-Solo es por estos meses después cuando tenga el poder de su título podrá hacer lo que quiera. Inclusive podrán estar juntos. Sería un escándalo pero su poder los protegería – Minho terminó de decirlo y tomó un sorbo de su te.

-¿Qué puedo hacer estos meses? – Dije acongojado – debo quedarme esperando, solo viendo como él sigue alejándose de mí. Haciéndose más importante y con mayor elegancia y esplendor.

– Estaba pensando que deberías acompañarlo – dijo bajando su taza y viéndome con una sonrisa – pienso que lo mejor para evitar cualquier escándalo y problema es mandarlo de viaje de compras. Nunca ha estado en Duhalo y he escuchado que las sedas, telas, alfombras y pañuelos son hermosos en ese lugar. El barco sale mañana y necesitará una persona confiable con quién ir. No pueden ir demasiados porque en lugares como ese uno debe pasar desapercibido.

No pude contenerme y salí corriendo al otro extremo de la mesa a abrazar a Minho.

–Gracias Minho bonito, mi carismático amigo.

-Deja de hacer eso, si no te alejas te golpeo – decía furioso tratando de empujarme – vas a llegar tarde porque Key está esperando esta noticia.

Salí corriendo solo le dije gracias otra vez a Lord Minho con una reverencia y corrí por las escaleras con alfombra roja hasta el gran salón, pasé por la amplia puerta de madera. Camine el empedrado frente a la mansión, pasé junto a la fuente y cruce la reja. Seguí corriendo las calles de adoquines y pasando todas las edificaciones blancas que me separaban de mi destino. Por fin llegué bastante cansado frente a la casona donde vivía Onew.

-Jonghyun – escuche a Taemin detrás de mi – ¿Qué te trae por aquí?

-¿Dónde está Key? – dije jadeando.

-En el cuarto de huéspedes, buscando ropa que le convine. ¿Quieres que le hable?

-No, yo voy a buscarlo – y rápidamente entré a la casa, subí las escaleras y llegué hasta el cuarto donde estaba Key.

-Jong…

-Nos vamos mañana –interrumpí rápidamente – Minho arregló todo –mi respiración seguía cortada.

-¿Qué? ¿A dónde? ¿Te encuentras bien?

-Nos vamos a Duhalo – dije – estoy bien solo tenía que decirte que mañana nos vamos-me quedé en silencio. ¿Había corrido tanto solo para decirle eso? Me encontraba pensando que era una tontería pero era una tontería que me volvía la persona más feliz del planeta.

-¿Vamos a ir juntos? – preguntó Key al verme ahí recomponiendo las fuerzas.

-Si te acompañaré y cuidaré de ti, ese es mi trabajo.

-Excelente – dijo con brillo en sus ojos, un brillo que nadie podría ignorar. La felicidad de su rostro podía mover al mundo, de hecho aun creo que su felicidad mueve al mundo. Por eso estoy seguro que la tierra gira. – Te aseguro que si vas de compras conmigo no te vas a aburrir.

-No creo que pueda aburrirme – no podía dejar de ver su rostro – porque te amo y se que viendo este rostro no puedo aburrirme nunca – dije esto mientras tomaba con mi mano su barbilla y acercaba su rostro a mi. Podía ya sentir su respiración en mi mejilla…

– Espera tía, nuestra visita tiene compañía, puede que estén discutiendo asuntos importantes – alguien estaba gritando desde el vestíbulo.

-Por eso mismo debó ofrecerles una taza de té Taemin, deberías saberlo, no llevas ya mucho tiempo trabajando para la mansión – los pasos empezaron a sonar en las escaleras.

Key se separó rápidamente de mí y no tardo en entrar la tía de Onew.
-Oh Jonghyun ¿Cuándo llegaste? , Taemin – grito de nuevo la señora – ¿Cuál visita importante? Solo es Jonghyun.

En ese momento me decidí sería una persona importante, alguien de quien estuviesen orgullosos y alguien capaz de permanecer junto a mi Duque.

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El ritmo de la Luna Llena +Capítulo 01+

01

La basura de unos es el tesoro de otros

La lluvia no tardaría en caer el cielo gris comenzaba a manifestarse con fuertes ruidos. El ambiente olía a tierra mojada y la gente comenzaba a abandonar las calles. Decidí correr sabía que era lo suficientemente rápido para llegar a casa antes de ser atrapado por la lluvia.
Mi entrenamiento había estado genial, de seguro ganaríamos en la copa de la ciudad sin problemas. A mis 17 años mi vida parecía ir en la dirección correcta y se trataba de una vida simple y feliz.
Un trueno de mayor magnitud hizo que corriera más rápido, solo me encontraba a unas cuadras de mi casa y con mi velocidad alcanzaría a llegar en unos pocos segundos. Pero para mi suerte algo se metió en mi camino.
Fue doloroso, una dolorosa caída. Voltee en todas las direcciones para saber si alguien me había visto tropezar, no quería pasar una mayor vergüenza. Luego me asomé a donde me había tropezado. De entre la basura podía observar un pedazo de pantalón y un zapato. Estaban en un orden anatómico que daba miedo, definitivamente era una pierna, una delgada pierna. Empecé a retroceder aun en el piso, cuando me fije que debajo de una bolsa de basura se encontraba una mano.
Estaba por correr pero la mano se empezó a mover al mismo tiempo que una gota de lluvia recorría mi rostro. Me acerqué cautelosamente y removí algunas bolsas para encontrar algo bastante inusual.
En el piso, frente a mí, se encontraba un ser humano, un chico, por poco y pienso que se trata de una chica, pero al fijarme bien pude ver a un niño con rasgos muy finos. Parecía estar bien, pero la imagen aun así asustaba.
La lluvia empezó a caer con mayor intensidad empapando la ropa del chico, su rostro hizo una mueca de incomodidad. La única solución que tuve fue cargarlo y llevarlo hasta mi casa que no se encontraba lejos. No podía dejar a nadie en ese clima.
No hubo ningún problema cuando llegué a mi casa por que mi padre había salido de nuevo y mi hermano tenía ya un año viviendo cerca de la universidad. Prácticamente vivía solo.

Conseguí ropa seca, preparé sopa caliente y acosté al chico en mi cama, lo cobijé con cuidado esperando ver alguna reacción pero parecía que no iba a suceder nada, mientras esperaba sentado en el piso y recargado en la cama el sueño me atacó y mis parpados se volvían más y más pesados.

Escuché un ritmo, el ritmo se repetía de nuevo, poco a poco estaba despertándome.
Ring Ding Dong
Ring Ding Dong
Mi celular continuaba sonando, me giré, aun estaba en piso y mi teléfono a unos cuantos centímetros de mí.
-Buenos días – contesté mientras me sentaba.
-¿Cuáles buenos días? ¿No sabes la hora qué es?
-Hola Key, gracias por despertarme.
-Deje de agradecer y ven ahora mismo por que estas por llegar tarde a clases – me paré rápidamente al ver la hora del reloj sobre mi escritorio.
-Mi record de ayer es de 12.34 minutos, se que puedo hacer menos esta vez, espérame en la puerta del salón Key. – Colgué rápidamente, me cambié, revisé al chico que aun estaba dormido y salí corriendo con mis zapatillas deportivas a toda velocidad.

-Te dije que llegaría a tiempo – dije frente a Key que ahora estaba por empezar a regañarme en la puerta del salón.
-Si no fuera por mí, nunca llegarías a clases.
-Mira un nuevo record 12.16 minutos, cada día soy más rápido – dije revisando mi cronómetro y recuperando mi aliento.
-No me importa tu velocidad, arregla ese cabello antes de que entremos a clases, y mira tu uniforme…
Key no terminó su regaño por que ahora el profesor entraba al salón y se disponía a comenzar la clase.
Key se la pasó regañándome a distancia en todas las clases por no poner atención, pero aun me preocupaba por el chico que había dejado en casa.

-Los cachorros después de vagar mucho tiempo caen completamente dormidos cuando encuentran un lugar seguro – Jonghyun hablaba con Key sobre un perrito que acababa de adoptar – fue tan cálido tener al cachorro dormido en mis brazos.
-¿Te lo encontraste en la calle así como si nada?- Key parecía muy interesado.
-Estaba en un basurero, a veces la gente es muy insensible con eso, pero es muy juguetón y alegre ¿Quieres venir a mi casa a conocerlo?
-¿De verdad puedo ir a tu casa a ver el cachorro?
-Claro baby, será muy divertido ¿Y tu que dices Minho?
– Yo creo que no puedo hoy – debía ir a ver al chico que había encontrado, además de que Key me había dicho con la mirada que si me atrevía a ir estaba muerto.
-Lastima viejo, sería excelente que viéramos películas también.
-Lo siento, pero tengo entrenamiento – en realidad no mentía tenía entrenamiento, pero últimamente era mi pretexto para todo. Key esperaba que lo ayudara en su situación.
-Bueno entonces nos vemos a la salida – Jonghyun se despidió y se fue con su grupo de amigos de su mismo año, mientras que yo me quedé con Key almorzando bajo ese árbol. No pensé que fuera buena idea decirle que me había encontrado un chico, aunque fuera mi mejor amigo, simplemente era muy bizarra la frase. Key encontré un chico en la basura, cada vez que la escuchaba en mi cabeza sonaba más rara.
Regresamos a clases y el profesor me regañó varias veces, pero estaba preocupado. Si el chico ya había despertado estaría asustado y confundido, me preguntaba si habría comido algo, si se encontraba bien, si no estaba enfermo o cualquier otra cosa o escenario que pudiera crear mi mente.
Cuando salimos sentí un alivio enorme, decidí faltar ese día al entrenamiento, pero debía aparentar por que si no Key me regañaría y Jonghyun sospecharía algo.
-¿Cuánto tiempo más debo dejarlos solos? – pregunté a la salida mientras acompañaba a Key hasta la puerta principal.
-Lo siento, prometo que no será mucho, es solo que aun no reúno el valor suficiente – Key estaba nervioso de nuevo.
-Tomate tu tiempo, tu mismo lo dijiste esto va a afectar toda tu vida y es tu única oportunidad, sigue luchando – por ahora solo podía darle ánimo ya habían pasado 2 semanas desde que me había dicho sobre sus sentimientos hacía Jonghyun y ahora estaba intentando confesarse.
-Chicos disculpen la tardanza, entramos al salón de música por un bolso que había olvidado una de las chicas, fue una misión secreta – Jonghyun ahora aparecía casi gritando aquello que debería ser un secreto- ¿Vas a venir Minho?
-Lo siento, ya debo ir a entrenar.
– ¿Me estas abandonando? – ahora ponía una cara triste y empezaba a hacer un puchero.
– No Jonghyun, yo solo…
-Jajajajaja, no te creas muchacho – dijo mientras daba golpecitos en mi hombro – sigue esforzándote con el futbol, seguro de que a la próxima vendrás.
Me despedí de los dos y fingí ir hacía las canchas, cuando estuvieron lo suficientemente lejos salí corriendo de la escuela.

La casa estaba en completo silencio cuando llegué, así que decidí ir primero a mi habitación, cuando entré el chico aun se encontraba en ese mismo lugar donde lo había puesto desde la noche anterior, aun dormido y parecía no haber despertado en todo ese tiempo.
-Debes estar exhausto – dije mientras lo cobijaba otra vez y recogía la sopa del día anterior.
Me fui a cambiar y cociné un nuevo plato de sopa, no era muy bueno cocinando pero conocía como hacer una buena sopa. Me senté de nuevo junto a la cama y comencé a ver ese rostro. Era bastante fino y con grandes labios, cualquiera lo confundiría con una chica. Su cabello estaba desalineado y teñido de un color claro, sus manos eran delgadas y finas. Regresé a su rostro tratando de memorizar cada detalle. Cuando sus ojos se abrieron de golpe. El susto me hizo retroceder un poco.
-¿Estas bien? – pregunté después de observar que el chico veía de un lado al otro – ayer te encontré donde la basura y te traje aquí cuando empezó a llover – parecía confundido, pero no asustado.
El chico se sentó en la cama y comenzó a ver de un lado al otro, como si buscara algo. Luego fue hasta el rincón donde había puesto su ropa a secar y sacó algo del bolsillo. Lo tomó con fuerza en su mano y regresó a la cama.
-Deberías comer algo – el dije mientras se volvía acostar y sujetaba ese algo con fuerza frente a su pecho.
Volteo a verme otra vez, parecía que no me había notado en todo ese rato. Se volvió a sentar y empezó a dar pequeños sorbos a la sopa mientras aun presionaba ese objeto contra su pecho. Me quedé en silencio mientras lo veía comer, parecía que tenía mucha hambre, se veía tan inocente y feliz comiendo.
-Si quieres algo más solo dime – le dije mientras recogía los platos y el se recostaba de nuevo. Me empezaba a gustar el papel de enfermero, más que nada por que mi paciente era bastante lindo y callado.

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